Posverdad y medios en la actividad política boliviana
Para entender la política actual en Bolivia. La «posverdad» como uno de los conceptos clave para concebir los problemas de desinformación, fake news y propaganda. La posverdad es un fenómeno donde los hechos dejan de ser importantes para la creación de actitudes y opiniones, y donde las creencias, los mitos sociales y las narrativas previamente formados cobran mayor importancia para la percepción de la realidad sociopolítica. En este sentido, la posverdad es un carácter de condición previa para el florecimiento de noticias falsas.
Con estos pocos ejemplos como “Caso Zapata”, “FONDIOC”, “Narcotráfico Pablo Ramos L.”, “Haisen Ribera excónsul”, “Las Londras” y ahora “Ítems fantasmas en la Alcaldía de Santa Cruz” podemos demostrar el abuso de la mala utilización del «Marketing» en la política para enmascarar que el actual gobierno y la Asamblea Plurinacional serian ilegítimos por no contar con un “Padrón electoral” confiable, sin verificación de una auditoria. El gobierno del MAS-IPSP comenzó a reaccionar de inmediato con campañas distraccionistas. En realidad, esto concuerda con los postulados básicos de lo que popularmente se llama «pospolítica», es decir, una política que no se basa en la promoción de ideas políticas sino en retórica incendiaria, acusaciones y terrorismo de información. De esta manera, como todos los métodos populistas crean en realidad la ilusión de actividades políticas concretas.
Este ejemplo es una guía de que las publicaciones mediáticas más o menos verificadas tienen el poder de crear y lanzar toda una serie de eventos (recordemos las propagandas y conferencias de prensa del procurador general del Estado, Dr. Chávez en relación con el FRAUDE ELECTORAL y el SUPUESTO GOLPE DE ESTADO). Incluso si tal contenido resulta ser fabricado o sacado de contexto, esto no cambia nada, dado que mientras tanto ya se han despertado “espíritus de desconfianza” o se han hecho narrativas basadas en la “imágenes que se hacen eco acerca de la transparencia y lucha contra la corrupción oficialista”. En pocas palabras, las creencias, los mitos (político-históricos-legendarios-sociales), las actitudes y los valores son categorías que tienen un carácter irracional. A partir de estas categorías, entre otras, se fundamenta el funcionamiento de las personas y comunidades sociales enteras. Por lo tanto, tales y similares declaraciones o eventos que tocan o perturban los postulados sociales básicos de los bolivianos, sin importar su exactitud o factibilidad, provocarán enormes reacciones el año 2022.
Por lo que, en esta era de la desinformación, es muy importante entender el concepto de posverdad, que busca explicar el estado en el que la sociedad (padece desde tiempos inmemoriales) está prácticamente atrapada, sin embargo, parece despertar las posibilidades de luchar contra mitos y creencias embusteras.
En la era de la inteligencia artificial, una persona carga dentro de sus acopios de información, lo que significa que a diario está en contacto principalmente con contenido que está en línea con sus preferencias en línea. Por lo tanto, esto está siendo muy bien aprovechado por los asesores extranjeros del MAS-IPSP para conocer diferentes puntos de vista en la comunidad en línea, los afines al oficialismo no están preparados para defender sus puntos de vista con argumentos, sino que ellos utilizan el discurso de desacreditación, odio y los insultos como una especie de mecanismo de defensa. Los hechos en un ambiente tan caótico en el espacio online no tienen valor, por lo que el funcionamiento de la democracia, basada en la toma de decisiones y el debate deliberativo en el sentido más amplio, corre peligro.
J. Waldo Panozo Meneces
Policía – Politólogo