NO HAY QUE HACERSE ILUSIONES CON EL ALCALDE MUNICIPAL
En las condiciones actuales se han creado premisas para que los ciudadanos cochabambinos determinen más y más el carácter, los métodos y las vías de exigir la renuncia del H. Alcalde Municipal. Esto no significa que sus socios MASistas disfrazados, khateros(as), khoscolis y rankheros representen “una magnitud insignificante”, a la que se pueda dejar de tomar en consideración. En modo alguno. Los MASistas disfrazados, khateros(as), khoscolis y rankheros(as) disponen todavía de una gran fuerza. En sus manos se halla un poderoso aparato manipulador en sociedad con el alcalde y su entorno.
Es evidente que, el gobierno municipal de los cochabambinos, y no sólo a él, le agrada la amistad con los khateros(as), khoscolis y rankheros(as) para movilizar sus marchas. En los años de la democracia, en Cochabamba nos encontramos con politiqueros en la dirección que creen que los khateros(as), khoscolis y rankheros(as) pueden crear una preponderancia de fuerzas en favor suyo y no cumplir con sus obligaciones que tienen con el entorno societario del municipio que son una mayoría y con cuyo voto alcanzo la silla edil. Ya la ciudadanía es testigo que de alguna manera ilegal les está cediendo los puestos de los mercados a título propio sin tomar en cuenta que esos predios son patrimonio de los cochabambinos y no de las ratas de alcantarilla que solo buscan quedar bien con estos sectores para enfrentar al entorno societario a quienes se deben las autoridades, por ello no se deciden a levantar la mano directamente contra el capricho de los khateros(as), khoscolis y rankheros(as), tales politiqueros concentraron sus esfuerzos para cumplir solo con estos sectores.
Hoy, en tiempos del COVID-19, los MASistas disfrazados, khateros(as), khoscolis y rankheros(as) han creado un gigantesco aparato de boicot, un ramificado sistema de bloques contra la cuarentena, y están supeditando la salud preventiva a la carrera de los contagios masivos. Los MASistas disfrazados, khateros(as), khoscolis y rankheros(as) quieren que las autoridades, departamental y municipales vivan bajo su “capricho” y de sus intereses sectarios, y amenazan a toda la sociedad con la desobediencia a las disposiciones legales y a las autoridades. Los MASistas disfrazados, khateros(as), khoscolis y rankheros(as) actuales se caracterizan en grado cada vez mayor por su parasitismo.
Son innumerables los hechos que demuestran que los MASistas disfrazados, khateros(as), khoscolis y rankheros(as) aplican una política de insolentes provocaciones y agresiones. Esto no es nuevo. Lo que hay de nuevo es que no sólo se denuncian todas las intrigas de sus socios autoridades municipales como concejales y asambleístas, sino que se les da una réplica rotunda y se atajan sus intentos de desencadenar disturbios locales.
La actual correlación de fuerzas permite exigir que la autoridad edil cumpla con los compromisos de su gobierno en favor de los derechos del entorno societario y del comercio formal, por vez primera en la historia, una tarea perfectamente real: la de obligar a los khateros(as), khoscolis y rankheros(as), bajo la amenaza del hundimiento de sus sectores al pago de impuestos reales y la implementación de servicio de transporte municipal, a no desencadenar una conflicto que afecte a los ciudadanos que nada tienen que ver con la politiquería y con sus problemas o compromisos políticos que se hicieron con marchas para distraer los procesos de la corrupción de su gestión.
J. Waldo Panozo Meneces
Policía – Politólogo